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La mente humana
respiramos. El aliento, por consiguiente, es "aliento de vida",
a la vez que la vida está en la sangre.
Reparemos cuidadosamente en que el hombre, hecho
enteramente de materia, se convirtió en
ser viviente
(alma
viviente, ver 1 Corintios 15:45) tan pronto como récibió
AIRE
para su vida física y temporal. La Escritura no nos dice que
tiene un alma inmortal. Es un ser vivo, animado, tan pronto
como la vida física entra en él.
La palabra hebrea para "alma" o "ser viviente" es
nefesh.
En Génesis 1:20-24 también a los animales se les llama
nefesh
tres veces, y en estos contextos los traductores han vertido la
palabra hebrea como "ser viviente". Los animales tienen el
mismo tipo de existencia fisicoquímica que tiene el hombre, y
ambos sufren el mismo tipo de muerte (Eclesiastés 3:19-20).
"El alma que pecare, esa morirá" (Ezequiel 18:4), dice el
Señor, y lo mismo se repite en el versículo 20 del mismo
capítulo. Adán era un alma y, refiriéndose al árbol de la
ciencia del bien y del mal, Dios le dijo: "El día que de él
comieres, ciertamente morirás" (Génesis 2:17). Pero el diablo
les dijo a Adán y Eva que Dios mentía y ellos prefirieron creer
a Satanás, como lo ha hecho casi toda la humanidad desde
entonces hasta la fecha.
¡Tratemos de entender! El hombre es
CARNE
y
HUESO.
Está compuesto enteramente de
MATERIA
y esa materia
viviente
ES
un alma o ser viviente. El alma está
compuesta de
materia,
no de espíritu.
Ya hemos explicado que el cerebro humano es casi
idéntico al cerebro animal. Pero el hombre fue hecho a imagen
y semejanza de Dios para tener una relación especial con El,
para tener el potencial de llegar a nacer dentro de la familia
divina, y Dios es espíritu (Juan 4:24).
Para hacer posible
tender un puente,
para hacer posible
la transición de seres humanos, compuestos enteramente de
MATERIA,
a seres
espirituales
(compuestos íntegramente de
ESPÍRITU)
en el reino de Dios, y al mismo tiempo para dar al
hombre una
MENTE
similar a la de Dios, El puso un
espíritu
en
cada ser humano.
En Job 32:8 leemos: "Ciertamente espíritu hay en el
hombre, y el soplo del Omnipotente le hace que entienda".
¡Esta es una gran
VERDAD
que pocas personas han captado!