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La mente humana
bles, y esa materia dejó de existir hace miles de años. Sin
embargo, al momento de la resurrección a ellos les parecerá
que sólo ha transcurrido una fracción de segundo desde que
cayeron inconscientes al momento de morir. Mientras perma–
necen muertos, esos justos no saben absolutamente
NADA.
"Porque los que viven saben que han de morir; pero los
muertos
NADA SABEN"
(Eclesiastés 9:5).
El espíritu que retorna a Dios es el espíritu humano que
estuvo en el hombre durante toda su vida. No se trata de un
"alma inmortal", pues ya sabemos que el alma es mortal y
corruptible.
Quienes murieron con el Espíritu de Dios morando en
ellos, estarán en la primera resurrección (Apocalipsis 20:4-5).
Resucitarán
INMORTALES,
con un cuerpo glorioso de composi–
ción espiritual y sus rostros resplandecientes como el Sol.
Todos los demás, quienes no fueron llamados por Dios
durante sus vidas humanas para recibir la salvación eterna,
resucitarán en el juicio del "gran trono blanco" (Apocalipsis
20:11-12). Este período de juicio tendrá lugar al final de los
mil años del reinado de Cristo. Quienes tengan parte en esa
resurrección volverán a la vida como seres
MORTALES,
una vez
más con un cuerpo físico compuesto de carne y sangre. En este
gran juicio ellos serán "llamados", es decir, sus ojos serán
abiertos a fin de que entiendan la verdad de Dios.
Finalmente, habrá una última resurrección (Apocalipsis
20:13-15): la de aquellos que, habiendo sido llamados por Dios
durante sus vidas humanas mortales, rechazaron su verdad.
Estos, junto con aquellos que rechacen a Dios durante el juicio
del gran trono blanco, irán al "lago de fuego" (II Pedro
3:10-11), que es la segunda muerte. Serán cenizas bajo las
plantas de los pies de los seres inmortales en el reino de Dios
(Malaquías 4:3); serán como si nunca hubiesen existido
(Abdías 16).
Entonces, cuando Dios nuestro Creador haya_sujetado
EL
UNIVERSO ENTERO
bajo la jurisdicción de los millones de
redimidos, ya nacidos de nuevo como seres inmortales
(Hebreos 2:7-8), ¡por fin se habrá realizado el tremendo y
grandioso
POTENCIAL HUMANO!
O