Página 73 - Spanish

Versión de HTML Básico

La educación
y
la religión
67
comunismo ruso, y aun así insistirían en retener todo el poder.
En tal caso, los comunistas chinos no se someterían y exigirían
que el gobierno mundial adoptara el comunismo chino. La
mayoría de las naciones rechazarían la democracia como
forma de gobierno mundial y Estados Unidos no aceptaría
algo diferente.
¿Habrá algo más imposible de realizar que el tratar de
reunir a las naciones de este mundo bajo algún tipo de
gobierno mundial, al cual cada país sometería todo su poder y
soberanía?
No. Aun cuando el Dios Omnipotente, el Creador y Señor
del universo entero, intervenga sobrenaturalmente para
establecer su gobierno mundial, su gobierno perfecto, las
naciones estarán airadas y lucharán contra El. Los hombres
dirán: "¡No queremos que Dios reine sobre nosotros!"
Esta es la razón por la cual Cristo regresará con todo el
poder, la gloria y la fuerza sobrenatural de Dios. Por eso
reinará
con vara de hierro.
El hombre jamás se someterá a
seguir el camino de la paz, la prosperidad, la felicidad y el
abundante bienestar, ¡a no ser que sea forzado a seguirlo!
Planeado desde la antigüedad
El Dios Todopoderoso está llevando a cabo un propósito
aquí en la Tierra y con gran cuidado planeó cada paso hacia la
realización de su proyecto.
Su primera promesa acerca de aquel mundo feliz se la
hizo a Abraham. Le prometió la Tierra entera como herencia
eterna a Abraham y a los que serían sus descendientes. Dios
dijo que en Abraham serían benditas todas las naciones del
mundo.
Al mismo tiempo empezó a asegurar la eficiencia y la
perfección de su gobierno mundial haciendo que Abraham,
Isaac, Jacob y José fueran entrenados durante su vida terrena
en varios aspectos básicos y esenciales para el personal de
primer rango en un gobierno perfecto.
Lo primero que requiere es una actitud recta; esto es
esencial. Dios mira el corazón, el espíritu, la actitud. Eso fue lo
que miró cuando escogió a David para que fuera rey de Israel
(1
Samuel 16:6-7, 11-12) y es lo que mira en cada uno de
nosotros. Estos hombres fueron disciplinados en la sumisión a