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Predestinación--¿doctrina bíblica?
ver usted ahora que la "predestinación"
nada tiene que ver con nuestra salvación
o condenación--con nuestra decisión--con
nuestro destino final?
Ahora tome nota de lo siguiente:
i"Habiendo sido PREDESTINADOS ... para que
seamos para alabanza de su gloria, noso–
tros
que
ANTES esperamos
en
Cristo"! Aque–
llos predestinados son los que PRIMERA–
MENTE confiaron en Cristo--imeramente las
primicias o la cosecha preliminar de almas!
¿Empieza usted a comprender ahora la glo–
riosa verdad? iLa predestinación no tiene
que ver con su decisión o con su destino-–
tiene relación únicamente con el TIEMPO
de su llamamiento--bien que sea usted lla–
mado AHORA, en esta era, o más tarde!
Observe lo que dice en el pasaje inscri–
to en Romanos 8:28-30: "Porque a los que
antes conoció". iQué SUBLIME es Dios! Si
usted es uno de los llamados ahora, Dios
ya le conocía aún miles de años antes de
que usted naciera "a los que antes cono–
ció, también PREDESTINO"--¿para condena–
ción? No, "para que fuesen hechos confor–
mes a la imagen de su Hijo, para que él
sea el primogénito entre muchos hermanos:
y a los que PREDESTINO, a éstos también
LLAMO". No dice que serán llamados en el
futuro--ya fueron llamados, en esta era.
iHélo aquí! Lea de nuevo este pasaje:
i"A
los que PREDESTINO,
a
éstos
también
LLAMO"!
La predestinación tiene que ver con la
acción y el efecto de ser LLAMADO. No tie–
ne que ver con la salvación o la condena–
ción. Aquellos que están siendo llamados
en esta era fueron conocidos de antemano
y PRE-destinados para ser llamados ahora
--para ser los PRIMEROS en poner su es–
peranza en Jesucristo. iTodos los demás
recibirán su vocación o llamamiento más
tarde!
Inos no decide por usted, anticipada–
mente, su salvación o su condenación. El
DECIDID con mucha anticipación cuáles ha–
bría de llamar en este PRIMER llamamien–
to, para que fuesen sacerdotes o reyes en
su Reino--ipara que tuviesen parte en la
salvación de OTROS!
iQué maravillosos son los caminos de rnos,
cuando El abre nuestro entendimiento y nos