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Las siete leyes del éxito
muchos no la entienden, es que los humanos no estamos
dotados de instinto. En este aspecto, los animales poseen
cierta ventaja sobre nosotros, pues no tienen que aprender.
Nunca tienen que devanarse los sesos con el aprendizaje.
Al becerro recién nacido no se le tiene que enseñar a
caminar. Inmediatamente trata de pararse sobre sus inseguras
y débiles patas. Quizá al principio se caiga un par de veces,
pero a los pocos minutos logra pararse, aunque sin mucha
estabilidad. El pequeño becerro no necesita un año o dos para
caminar, ni siquiera necesita una o dos horas, sino que
empieza a caminar
¡en unos cuantos minutos!
No necesita
discurrir sobre ninguna meta. No precisa de libros de texto ni
de enseñanza. Instintivamente
sabe
cuál es su meta: ¡comer! E
instintivamente también sabe el camino. Sobre sus cuatro
patas se dirige de inmediato a su primera comida.
Lo hemos repetido muchas veces: Los pájaros construyen
sus nidos por instinto; nadie les enseña a hacerlo. Una vez se
llevó a cabo un experimento en el que cinco generaciones de
pájaros tejedores fueron alejados de sus nidos y de los
materiales para construirlos. Nunca vieron un nido. Cuando a
la sexta generación se puso a su alcance material para
construir nidos, los pájaros, sin instrucción alguna, ¡procedie–
ron a construir nidos! No fueron nidos de cuervo ni de águila
sino de la misma clase que los pájaros tejedores han
construido desde la creación. Ellos no tienen
mentes
para
discernir, imaginar, diseñar o construir ninguna otra clase de
nido.
Es verdad que algunos perros, caballos, elefantes y otros
animales pueden ser enseñados y entrenados para ejecutar
ciertos trucos, pero no pueden razonar, imaginar, pensar,
planear, diseñar ni construir cosas nuevas y diferentes. No
adquieren conocimiento ni distinguen entre el bien y el mal,
no toman decisiones ni ejercen la voluntad para autodiscipli–
narse de acuerdo con sus propias decisiones y razonamientos.
LOS ANIMALES NO PUEDEN DESARROLLAR CARÁCTER MORAL Y
ESPIRITUAL.
En cambio, para los seres humanos la vida no es tan fácil.
Los humanos tienen que
aprender
o ser enseñados a caminar,
hablar, comer y beber. Nosotros no logramos esto instintiva o
inmediatamente como los animales. Puede llevar un poco más