Página 13 - Spanish

Versión de HTML Básico

EL PRIMER MANDAMIENTO
15
mente. Pero como naciones y como individuos, ponemos no uno,
sino MUCHOS "dioses" en lugar del verdadero Dios de la Creación
- ¡el Dios revelado en su Biblia!
Necesitamos arrepentirnos de esto y dejar de servir a dioses
falsos.
El primer mandamiento
y
usted
Ahora que hemos visto el poder y el vigor con que Dios se
reveló a sí mismo cuando pronunció los Diez Mandamientos desde
el Monte Sinaí, veamos cómo
cada uno de ellos
-
empezando con
el primero, es aplicable a· usted,
personalmente.
Porque si usted
dice que es cristiano, recuerde que Jesucristo, el fundador del
cristianismo, dijo que usted debe vivir por CADA palabra de Dios
(Mateo 4:4). Y ciertamente, con la ayuda de Dios, usted debe
andar de acuerdo a los
mandamientos
del Omnipotente, si es que
quiere entrar en la vida eterna (Mateo 19: 17).
¿Cómo es entonces aplicable a USTED el primer mandamiento?
"Yo soy el Eterno tu Dios", declara el Creador. ¿Es el Dios de
la
creación,
el Dios de
Israel,
el Dios de la
Biblia,
realmente
su
Dios, a quien usted
sirve
y
obedece?
¿O evoca usted a su propio
"dios" o "dioses" FALSos? ¿O está usted practicando una adoración
falsa por seguir las "tradiciones de los hombres", lo cual Jesús dijo
le harían que adorase a Dios en vano? (Marcos 7:7).
¡Este es un asunto que
usted
necesita considerar seriamente!
A
los cristianos, Dios les dice que EL es QUIEN los "sacó de la
tierra de Egipto, de casa de servidumbre".
A
través de la Biblia,
Egipto tipifica el PECADO. Todos los inconversos están bajo el yugo
de la esclavitud, sirviendo al sistema organizado y
paganizado
de
este mundo, y son siervos también de sus
concupiscencias
persona–
les.
Cuando una persona se convierte realmente, Dios la SACA de
ese yugo - y la persona siente complacencia en ello.
A
usted le corresponde averiguar si en realidad ha salido de las
falsas tradiciones y caminos de este mundo, y también si en verdad
se ha arrepentido de sus concupiscencias y pecados personales.
Dios manda: "No tendrás otros dioses delante de mí". ¿Ha
puesto usted alguna otra cosa en LUGAR de Dios? ¿Es su
tiempo,
su
interés, su
servicio
dedicado más a alguna cosa que al verdadero
Dios? ¿Qué ÍDOLO ha colocado usted entre usted y el verdadero
Dios que le impida
estudiar
de veras su palabra, y
vivir
por ella?