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EL NOVENO MANDAMIENTO
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verdad acerca de la existencia de un Creador y su propósito sobre
la Tierra. Dios dice que los vanos filósofos y científicos de este
mundo "no tienen excusa" al negar que El literalmente CREÓ el
universo y ahora lo gobierna con su poder (versículo 20).
Los más de los científicos y teólogos que creen en la diabólica
teoría de la evolución
debieran
estar
mejor enterados.
Algunos de
ellos lo están, pero se conforman a los deseos de los hombres, y
siguen
viviendo
una MENTIRA.
Dios dice que "no tienen excusa".
Y en la misma categoría están aquellos mínistros y estudian–
tes de la Biblia que contínúan enseñando y practicando lo que DE
SOBRA RECONOCEN como creencias y costumbres paganas que
Dios
condena en su Palabra.
En demasiados casos,
ellos saben la
realidad.
Ellos "no tienen excusa".
La continuada enseñanza de estas MENTIRAS fundamentales
de carácter científico y espíritual está CEGANDO a las mayorías en
el mundo, impidiéndoles ver la verdadera
naturaleza
de Dios así
como su verdadero plan y propósito aquí en la Tierra. Este es el
TERRIBLE efecto de hablar falso testimonio: auto-engaño y MEN–
TIRA.
Porque mientras los supuestamente "cultos" líderes sigan
engañándose a sí mismos y engañando a otros acerca de la
existen–
cia
misma y el
poder
y el
plan
de Dios, nuestra civilización está
CONDENADA A LA EXTINCIÓN.
Vivamos por la verdad
Así pues, en su vida personal, aprenda la importancia de
decir
la verdad,
creer
la verdad,
vivir
la VERDAD. TENGA CUIDADO de no
basar su vida entera en una serie de MENTIRAS - ya sean éstas
personales, políticas, científicas o religiosas.
Recuerde que es la VERDAD la que le hará libre (Juan 8:32).
En su conversación personal,
vigile sus palabras cuidadosa–
mente.
No siempre tiene que decir todo lo que sabe. Pero cuando
hable, que sea la VERDAD. Recuerde: "La muerte y la vida están en
poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos" (Prover–
bios 18:21).
Jamás olvide que el hombre es tan bueno como lo es su
palabra.
Si el hombre se convierte en un mentiroso habitual, es