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Su portentoso futuro
edades o civilizaciones en ella: el "mundo antiguo" o
antediluviano, que comprende el período de Adán hasta Noé
(11 Pedro 2:5; 3:6); el "presente siglo [mundo] malo", que
abarca desde el diluvio hasta la segunda venida de Cristo
(Gálatas 1:4); y el "mundo venidero", que comenzará con la
segunda venida de Cristo y el establecimiento del reino de
Dios (Hebreos 2:5).
Este versículo menciona los ángeles como si el mundo
hubiese sido gobernado por ellos. De hecho, la Epístola a los
Hebreos empieza hablando de Cristo y los ángeles y de la
relación que existe entre estos últimos y el hombre.
Tengamos en cuenta cuál es el tema de este pasaje: "el
mundo venidero, acerca del cual estamos hablando", es decir,
no la era presente cuyo
fin
se acerca rápidamente. En el
versículo 6 leemos: "Pero alguien testificó en cierto lugar,
diciendo ...", y entonces Pablo cita solamente los primeros
seis versículos del Salmo 8.
En dicho salmo David habló específicamente del
dominio actual del hombre: la tierra, el aire y el mar. Mas
ahora el autor de la Epístola a los Hebreos añade algo
radicalmente
diferente,
¡algo que ocurrirá en el mundo
venidero.
Esta revelación del propósito de Dios para el hombre, del
increíble y glorioso potencial humano, deja perpleja la
imaginación. La ciencia nada sabe al respecto. Hasta donde yo
sé, ninguna religión lo enseña. E indudablemente el sistema
educativo de este mundo lo ignora por completo. Empero, es
algo que Dios mismo dice tener preparado para aquellos que le
aman (1 Corintios 2:9-10).
Hemos dicho ya que Dios reveló el conocimiento indis–
pensable a nuestros primeros padres, pero ellos
no creyeron
sus palabras.
Unos 4000 años más tarde Jesucristo llegó a la
Tierra con un mensaje que traía del Padre, el cual revelaba ese
mismo conocimiento. Mas solamente un puñado de personas
(120) creyeron lo que El dijo, si bien muchos dijeron creer en
su persona (Juan 8:30-31, 37-38, 40, 45-46).
Hoy la ciencia, la religión y el sistema educativo siguen
sin creer LO
QUE
EL DIJO.
Ahora veamos lo que dijo Pablo luego de citar sólo la
primera parte del Salmo 8: "Todo lo sujetaste bajo sus pies