Página 26 - Spanish

Versión de HTML Básico

22
Un mundo secuestrado
Cabeza de la Iglesia en el cielo desde donde supervisa a su
Iglesia.
Al regreso de Cristo con gloria y poder supremos, Satanás
será quitado del trono de la tierra. Jesús se sentará sobre el
trono de David para reinar sobre Israel, y también se sentará
sobre el
TRONO DE LA TIERRA,
el cual está actualmente en poder
de Satanás.
La Iglesia ha de estar lista
La Iglesia habrá sido preparada para su maravillosa tarea
de gobernar bajo la dirección de Cristo cuando regrese como
Rey de reyes y Señor de señores.
¿Cuál es, entonces, el verdadero
PROPÓSITO
de la Iglesia?
¿Por qué fundó Jesucristo la Iglesia? ¿Fue acaso para reparar
la superestructura defectuosa y decadente del edificio con el
cual he comparado este mundo malo? ¿Fue para "salvar" por
medio de la conversión este mundo pecador de Satanás? ¿Fue
para que se dividiera en muchas denominaciones y ramas:
ortodoxos, católicos y protestantes?
Todo el mundo que profesa ser "cristiano" ha sido
engañado. Todas las naciones han sido engañadas. Apocalipsis
12:9 lo afirma en forma clara y enfática.
Dios dio comienzo a su misión y a su
DESIGNIO
supremo de
reproducirse a sí mismo por medio de Adán, el primer ser
humano. Sin embargo, para llegar a ser un hijo engendrado de
Dios, de modo que al desarrollar el carácter espiritual divino
pudiera
NACER
en la
FAMILIA DE
DIOs, Adán tenía que tomar
una decisión. Adán optó por la apostasía, la rebelión, su
propia justicia mezclada con mal, el camino del secuestrador
de la familia potencial de Dios.
Dios le dijo claramente a Adán que si desobedecía y
tomaba del fruto prohibido, ciertamente moriría. Su existen–
cia temporal tocó a su fin y murió al cabo de 930 años.
Al examinar Efesios 2:1-2, vemos cómo Satanás, príncipe
de la potestad del aire, de hecho influye y actúa en la men te de
los descendientes naturales de Adán. Satanás actuó en el
primer hijo de Adán cuando mató a su hermano Abel. Todos
los hijos de Adán han pecado, y todos, hasta los que viven hoy,
MUEREN.
Sin embargo, desde la fundación de este mundo, en el